Está a punto de terminarse la primera década del siglo XXI. Para muchos se cierra un ciclo, pues la mente occidental está entrenada para contar de acuerdo con el sistema decimal. Por eso la importancia del número 10. Originalmente, el calendario romano constaba de 10 meses (de ahí la etimología de
diciembre); pero intervino el papa Gregorio: los días se dividirían no en 10 sino en 12 meses. Psicológicamente además, el 10 se asocia con 'éxito', pues en la escuela se nos enseña que resulta más conveniente obtener 10 de calificación que, por ejemplo, 5. Incluso la edad considera el 10 como etapa básica de la personalidad. Así, el vocablo inglés
teenagers proviene de
ten (diez) y
age (edad); a partir, de ahí, se cuenta por décadas: los veintes, los treintas, los cuarentas, los cincuentas... y aquí voy contando.
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