domingo, 19 de diciembre de 2010

Don Étimo


La palabra catarro,
tan en boga
en los días decembrinos,
proviene del griego kata,
hacia abajo;
y rhein,
fluir, manar.
Es decir, de la nariz
o mejor, de las fosas
nasales,
fluye líquido
sin nuestro
permiso. Es síntoma
de la gripe,
vocablo de
origen francés: gripper,
agarrar (de la garganta),
con sensación
de asfixia.

1 comentario:

Anónimo dijo...

¿Y la etimología de GDIPA