Lo anterior lo dijo el escritor en rueda de prensa, donde habló además sobre lo que representa para él recibir mañana el Premio de Periodismo Cultural Fernando Benítez.
"La feria es espejo del mundo editorial, que está dominado por la industria y el mercado no por la cultura, los libros más vendidos son los de Jordi Rosado o los cuentos de Brozo; cuando vienen cómicos o actores se paraliza la feria", opinó el autor de El Testigo.
"Creo que por momentos la FIL ha confundido la estadística con el éxito de tal manera que parece más importante que alguien hable ante 2 mil personas y no ante un público que verdaderamente pueda escucharlo". Aunque le parece extraordinario que la FIL tenga que ver con el mercado, pues de eso depende su subsistencia, para el cronista y periodista, es vital que se recupere un estilo más pausado, en el cual se priorice la presentación de un poeta por encima de la de una estrella porno que escribe un libro como lo hizo ayer Sasha Grey.
"He visto incluso que le pasen una tarjetita a Saramago, siendo ya premio Nobel, ¡para que deje de hablar! Creo que muchas veces estas sesiones de psicoanalistas de 50 minutos son insuficientes. La cultura requiere de lentitud y de pausa".
2 comentarios:
concuerdo que se revisen los criterios de desempeño de la FIL, para pasar de la estadística indicativa a procesos cualitativos. Pero ¿le interesará eso a Raúl Padilla, amo y señor de los negocios culturales de la UdeG? creo que no, pues no le serviría para premiar y cooptar a intelectuales que invita discrecionalmente en medio de la barahunta comercial. Y claro que si se privilegiara la presentación de pensadores y creadores de calidad, es necesario abrir los foros no solo a la poesía o la novela, sino también al ensayo, a la economía, la filosofía, la ecología, entre otros ejes del conocimiento y el pensamiento. Ello lleva al debate de la actualidad y a la profundización de la inteligencia, lo cual es claro no es el objetivo del licenciado Padilla, operador magistral de negocios personales, distribución de prebendas, chantajes al gobierno, armando redes de cooptación de intelectuales y políticos, como base de la participación de Padilla en el reparto del poder en Jalisco.
Hay algo parecido con el teletón y la cantidad de dinero que como meta siempre logran recaudar, para que se siga manejando el éxito de la franquicia la asistencia la inflan con indiscriminado acarreo de estudiantes de secundaria y de preparatoria. Si quieren ofrecer venturosos numeritos, mejor que expongan el número de libros vendidos y veremos si la gente lee por la fil o al menos compra.
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