jueves, 4 de julio de 2013
Cita
Ab eo quod, 1956, Leonora Carrington/ **********************************************************************************************
Quizá en el origen se planteó como cita entre amigos, pero todo se hizo uno de golpe: el vino, la atmósfera cálida, la tensión que fue en aumento (la cabrita del tapiz acaricia, quiere treparlo, el tronco del árbol, bajo la mirada severa de su pareja oficial), elevando la rosa blanca de la pura amistad al extremo de no poder más que abrirse toda para vertirse toda sobre la redonda forma: óvulo/huevo/útero, producto encendido de la amistad ahora erótica intensa, fruto luminoso alrededor del cual revolotean palomillas-feromonas que en metamorfosis singular devienen mariposas, emisarias de colores del obscuro objeto del deseo que emerge, potente deseo púbico subterráneo, debajo de la mesa. Se constata lo que ya estaba escrito en el Menú: Ab eo, quod nigram caudum habet (por él, que tiene una cola negra) abstine terrestrium (que apega -ya no a la amistad aérea- a la tierra) enim decorum est (y porque es hermosa).
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