lunes, 12 de agosto de 2013

Debate crudo/ Habemus ovo?

Patria: tu superficie es el maíz,
tus minas el palacio del Rey de Oros,
y tu cielo, las garzas en desliz
y el relámpago verde de los loros.

El Niño Dios te escrituró un establo
y los veneros del petróleo el diablo.
-Ramón López Velarde
Cuando se sabe del deseo de reformar (por cautela no se usa ya el verbo cambiar) de los hombres de poder, cabe preguntarse si de veras poseen toda la información necesaria para tomar una decisión irreversible en el terreno legal, por ejemplo, sobre el petróleo. ¿Sabe Peña Nieto por qué el llamado oro negro tiene como unidad el barril? ¿Sabe que un barril equivale a 42 galones porque así lo determinó el Imperio británico y lo adoptó luego, EEUU? Da curiosidad saber si el presidente conoce el equivalente de 42 galones en litros (159); y si está enterado también de que el precio del barril de petróleo se basa en el precio, en dólares, del West Texas Intermediate, esto es, del barril texano que es el referente internacional. De geopolítica petrolera (la guerra de y por los mercados de petróleo) ya ni dan ganas de preguntar, pero se prefiere creer que el presidente al menos cuenta con un equipo de expertos que lo aconsejan en la materia (dúdase que Pedro Joaquín Coldwell -actual Secretario de Energía cuyo cargo anterior fue la dirigencia del PRI- y Emilio Lozoya -actual director de Pemex- sepan todo lo anterior ¿O sí?). Da curiosidad saber qué tanto saben en el gobierno del energético que aún mueve toda la maquinaria del mundo; más cuando la oposición de izquierda insiste en plantear el dilema: o se respeta la nacionalización... o se privatiza. ¿De veras ese es el meollo de la cuestión petrolera? Da curiosidad saber si se sabe (es decir, si todos los involucrados en la discusión saben qué alegan) para reconocer al menos -uno que no es ingeniero químico y descree de los ultranacionalismos- quién cloquea de balde cuando anuncia que ya puso huevo. En suma, falta un debate sobre el debate petrolero, caray.

1 comentario:

Sergio dijo...

en la sobada y chillona frase de que el petróleo es de todos los mexicanos, a mi que me den mi parte y que ¡con su pan se lo coman! ¿dónde me formo?