sábado, 16 de marzo de 2013

Bocardenal

Juan Sandoval fue el ''micrófono de Dios''
◦No usaron micrófono porque temían que saliera la voz y robaran la señal
El Arzobispo Emérito ''gritó'' por dos días las votaciones; recibió un regalo por su labor
ROMA, ITALIA (16/MAR/2013).- El Cónclave en donde se eligió al Papa número 266 de la Iglesia Católica tuvo representación activa de la Perla Tapatía. La desconfianza de usar un micrófono al interior de la Capilla Sixtina, por el temor de que este aditamento facilitara "filtrar" los resultados de las votaciones para designar al nuevo jerarca eclesiástico, permitió a una voz fuerte convertirse en el "micrófono de Dios".
Es el apodo con el que hoy los cardenales de todo el planeta reconocen en tono de broma al Arzobispo Emérito de Guadalajara, Juan Sandoval Íñiguez, quien durante los días de votación en el Vaticano se ofreció para "gritar" en italiano, tanto las papeletas como el nombre de los entonces candidatos "papables".
"Los cardenales me agradecieron el servicio por dos días; me decían: ‘¿no se cansa?’ -No, no me canso-, les respondía. Me dio mucho gusto llenar con mis gritos la Capilla Sixtina, dije: 'Miguel Ángel la hizo a esta medida para mi voz' (…) Me hice muy famoso en el Cónclave por estar gritando los votos".
La "frescura" del nuevo líder de la fe Católica en el planeta, quien restó solemnidad a su primer discurso ante miles de fieles en la Plaza de San Pedro (al priorizar el saludo y pedir a los fieles que oraran por él), tuvo continuidad durante la cena que siguió a ese acto protocolario.
El buen humor entre los representantes de esa Iglesia a nivel mundial continuó presente, y a manera de agradecimiento (aunque un tanto en tono de broma), Sandoval Íñiguez recibió una trompeta, regalo que desató carcajadas entre los presentes.
El cardenal tapatío ya tuvo oportunidad de hablar con el Papa Francisco, aunque previo a que el ser envestido como Sumo Pontífice, la relación entre ambos ya era cercana. "Siempre ha sido muy buena; mucho conoce de mi vida y sé que es un hombre de Dios".
Considera que Jorge Mario Bergoglio "se ha ganado a medio mundo", pues al elegir el nombre de Francisco ha elegido un camino de "humildad, sencillez y pobreza", así como forjado un vínculo con la comunidad franciscana.
En el primer diálogo entre ambos, luego del Cónclave, el Papa Francisco pidió a Juan Sandoval que "rezara por él", además que ocasionalmente acudiera ante él para "contarle cuentos", como es su costumbre.

2 comentarios:

Aarón dijo...

Patetico

Sergio dijo...

La hace de Rulfo el labios-gruesos.