En el centro de una mesa ¿de laboratorio? se observa una manzana amarilla. De ahí el título de la obra: "la mela", vocablo italiano que significa, precisamente, la manzana. Pero no cualquier manzana sino la variedad 'Golden delicious', producto de un cruce involuntario de semillas en una granja de Virginia, EEUU, que a partir de 1914, comenzó a vender dicho fruto híbrido con gran aceptación a nivel internacional. Así, en torno de la mesa luminosa de cristal, se agolpan prismas hexagonales o estructuras químicas que combinadas en un flujo o torrente genético que,de izquierda a derecha, surge debajo de la mesa y en una curva ascendente, en medio de chispas y destellos, presencia de frente el nacimiento en la plancha, de "la mela" ('melaza', 'melcocha', 'miel') cuya dulzura abre las celdillas hexagonales de las abejas que se ven atraídas, hipnotizadas, por el amarillo intenso de la manzana-sol, alrededor de la cual giran todas las formas geométricas, incluidas las del pintor "Matta" que se exhibe como manzana amarilla mediante un expresionismo abstracto que va más allá del surrealismo, dejándose arrastrar por ese flujo de curva ascendente, antes que por la razón, por la locura del pincel. Por cierto, "Matta" en italiano, es "loco".
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