martes, 24 de noviembre de 2015

Percibir el tiempo real

En el crepúsculo de 2015, conviene pre-disponerse a exudar y filtrar las experiencias y relaciones personales vividas, a fin de rescatar lo significativo (no lo banal) para nuestra ruta existencial, operando así no un mero cambio cuantitativo, cronológico, sino cualitativa e intensamente kairótico. Cabos sueltos, mejor -en efecto- soltarlos. Y abrir las ventanas de la percepción lo más limpias posible hacia el 2016. No tic-toc sino lo profundo (sonido de la respiración).

No hay comentarios: