jueves, 1 de mayo de 2014

La fractura entre discurso lógico en la superficie y discurso emotivo subterráneo

Adulto- (sonriente, complaciente) Vamos, conmigo puedes hablar sin miedo, con toda libertad, de lo que quieras
Niño- (entusiasmado) ¿De veras, me promete no contárselo a nadie?
Adulto- (tono de ira) ¡Baja la voz, a mí no me vas a gritar! 
(tono amable) Anda, ¿qué me quieres decir?

3 comentarios:

oskar dijo...

Falcón, podrías explicarme sobre la Teología de la Liberación, no me quedó muy claro en que consiste. Con manzanitas y naranjitas.

Falcón dijo...

Oskar- supongo que te refieres a un comentario formulado en el programa de 'El Acordeón'; pero no recuerdo haber mencionado yo dicha Teología ¿No sería alguno de los invitados, como el Fabián Acosta, por ejemplo?

oskar dijo...

Si, así fue, lo escuché en el acordeón y creo que fue Fabián A. el que tiene una voz muy suave.