¿Papa?

La Iglesia (del latín ecclesia, 'congregación' o 'asamblea') católica (del griego kathólikos, de kat- 'de acuerdo con'; y holos, 'el todo': universal) es una institución estructurada por completo sobre la base de la figura paterna. Es Dios Padre, es Dios Hijo, es San Pedro, la Piedra (o falo erecto), es el Papa ('papá' en italiano), es el sacerdote (sacrodote, quien lleva lo sagrado). Y el Padre exige respeto y obediencia para que no se incurra en pecado. Pues pecar proviene de ped-ccare, traspié, tropezón... con la Piedra: y en la caída viene la penitencia, el castigo. ¿Por qué Dios expulsó del Paraíso a Adán y Eva (o la costilla: símbolo fálico cortado y desprendido)? Por desobedecer. La mujer así, dentro de la Iglesia, es invitación al coito, por ende, a pecar. Y ya se sabe, el sexo -se nos insiste dese la niñez a callarlo- es pecado. Por eso el Padre ordena abstinencia, celibato, castidad a sacerdotes y monjas: es decir, los castra. En un mundo exclusivamente masculino como el de la Iglesia católica, ¿es difícil explicar la homosexualidad, la pederastia? Así, una papisa resultaría impensable, pues sería necesario cambiar a Dios-Padre por Dios-Madre. Y para madre -nos aclaran- ya está la Virgen misteriosamente inmaculada, ajena por completo a lo sexual.