De corbata

El primer nudo de corbata lo hizo un hombre para acordarse de algo que, luego de intentar recordar haciéndolo y deshaciéndolo, olvidó
La corbata, junto con el traje, es la prenda masculina formal (no esencial) por excelencia. Imposible olvidar que se trata de una soga al cuello que aprieta al culpable de someterse al doble lazo del dictamen de la moda más la regla social estricta para caballeros en bodas de alcurnia u oficinas de alto rango. El incidental origen de la palabra corbata dota de especial significado a la prenda. Durante la Guerra de los Treinta Años (1618-1648) de Europa, una panda de mercenarios croatas a caballo irrumpió en París. Los soldados llevaban atado al cuello una especie de largo pañuelo rojo cuya punta final quedaba oculta a mitad del pecho bajo la camisa. El ojo parisino vio una tendencia de la moda allí donde había un recurso para secarse el sudor. Los jinetes de los Balcanes se autonombraban Hrvati, que los franceses pronunciaban crvati o croati. De la fusión de hrvati y croata surgió corbata. Y si la corbata pende, vista de abajo a arriba es prenda erecta. Por tanto, es prenda masculina formal porque la forma fálica ata la cabeza al pubis (máxima forma de sometimiento a la moda) convirtiendo todo el frente, abdomen, cuello y cabeza en pene erecto. De ahí su fuerza machista... y poder. Así lo captó el Duque de Windsor, árbitro del divorcio ("por delante, como la corbata, va la mujer que me enseñó a hacer el amor y a desunirme del Reino Unido") y la elegancia, que por el modo de portar su corbata dio nombre al Windsor Knot o 'Nudo de Windsor': un gran juego de manos masturbatorio de rigurosa destreza.
El Nudo de Windsor exige muchas horas de entrenamiento frente al espejo y es tan estricto que incluso los gringos, tan prácticos y tan de prisa como siempre, inventaron la corbata con el nudo ¡ya hecho!, al cual añadieron unas pequeñas lengüetas de madera que se encajan bajo el cuello de la camisa. La elegancia sometida a la función: por encima del laberinto manual de la corbata está llegar a tiempo a la oficina. La corbata de moño (pajarita la llaman los metafálicos ibéricos) se porta con el esmoquin (de smoking jacket, saco para fumar con glamour en la fiesta de socialités), simplifica, pero aprieta aún más formalmente que el Nudo de Windsor, los testículos a la garganta.