lunes, 16 de enero de 2012

Pre-osamenta

Corren tiempos de precampaña electoral y muchos de los aspirantes a un hueso -¿cuántos recibirán un cargo como regalo envenenado? ¿Cuántos perecerán de una sobredosis de poder? ¿Cuántos caerán bajo el vituperio público?- bien harían en leer al paradójico Francisco de Quevedo:

Solamente los hechiceros de la ambición pudieron confeccionar corona que quitase corona, honra que atosigase la honra, vida que envenenase la vida, adoración que produjese el desprecio, aplauso que granjease odio.

-en Vida de Marco Bruto

No hay comentarios: