Dante y Beatriz, 1883, Henry Holiday En la escena superior, Beatriz Portinari, casada ya con un banquero, aparece, de súbito, frente a su admirador amoroso: Dante que necesita apoyarse por la sorpresa, se lleva la mano cerca del pecho, hasta se desequilibra al detener su marcha y quedar con un pie delante, vacilante. ¿Cuál de las tres damas es Beatriz? (oprímase la imagen). Los cuatro personajes del cuadro, además, muestran cuatro formas de seducción. ¿Cuáles son? El drama del cariiño tanscurre en la Florencia de 1287, en el Puente de la Santa Trinidad, sobre el río Arno. Al fondo, el Ponte Vecchio (o puente viejo).
12 comentarios:
Estoy convencido que va de amarillo (o verde.... soy daltónico).... ella lleva una fruta en la mano... Un personaje tan refinado intelectualmente como Dante no caería en la seducción burda de la dama de rojo(¿?)... la de azul me parece también posible, pero no se fija en él, esta preocupada de la vida, del quehacer mundano, las compras, los niños, las deudas... atrapada en lo mundano tampoco es digna de Dante... pero sea como sea Dante no es digno de mujer alguna.... Vuela libre sin jamas pisar los pies en tierra firme... Toda mujer busca alguien que la deflore, que la alimente y la sostenga, Dante sólo vuela.
La Bice es la de amarillo con la flor en la mano.
Para mi que se las está cogiendo a las tres, y lo que esta verificando con su mano izquierda, es si trae suficientes condones...
Pareciera ocurrir lo siguiente:
La dama de rojo, mira a Dante porque su señora, la patrona, evidentemente Beatriz le acaba de decir"..mira, quien esta ahí", y posteriormente enmudece y a punto esta de sonrojarse, lo que se nota en su semblante, esto, por la situacion, ademas el pintor selecciono los tres colores primarios para los vestidos de las damas, reservandondo el mas luminoso, el amarillo o dorado para la Sra.
Obsérvese de qué manera salerosa las tres bellas se pasean frente a Dante como inocentes y blancas palomas, mismas que se pueden apreciar abajo, a un lado.
Y es que, ¿habrá sido coincidencia el encuentro?
¿O se trata de tres dragonas llameantes justo como las que aparecen en el pebetero a espaldas del poeta?
Es una Divina Comedia de seducción.
PD- y como siempre, el hombre es el lento.
Nótese la metáfora: Dante intenta tender un puente para aproximarse a las 3 damas 3 que transitan por el Puente de la Santa -precisamente- Trinidad.
Las artes de la seducción cuentan con muchas estrategias, pero en el cuadro de Holiday se muestran simbólicamente:
a)la seducción erótica-el placer (rojo)
b)la seducción 'normal', correcta socialmente-el deber (amarillo)
c)la seducción inocente- el asombro, el deseo de conocer (azul).
PostPD- el Ponte Vecchio al fondo indica que posponer la estrategia de seducción, la 'casualidad' del encuentro quizá se realice, pero demasiado tarde, cuando los cuatro personajes tengan sus vidas más hechas, cuando no quede más remedio que saludarse de lejecitos, como viejitos (Vecchio). Digo, con cariiño, pero sin pasar al acto, caray.
Muy Señor mío:
Le confieso que desperté esta luminosa mañana con el impulso de pedirle que comentara la obra de un artista francés decimonónico que ha ocupado mi atención durante las últimas horas. Decidida a cumplir con mi propósito ingresé temprano a su blog, y, ¿con qué me encuentro?: con ‘Dante y Beatriz’ del pintor londinense Henry Holiday, y una invitación a descubrir sus enigmas. Sorprendida ante tal inesperada convergencia, no de autor sino de intereses por las Bellas Artes, dejé aun lado mi obsesión inicial y me sumergí en la búsqueda de respuestas a sus preguntas.
Como no está en mi ánimo extenderme en detalles que fácilmente pueden ser rastreados por quienes deseen conocer el amor platónico de Dante por su amada Beatriz, intentaré a continuación esbozar una solución a sus dudas concretas:
¿Cuál de las tres damas es Beatriz? Me inclino a creer que ninguna de las que se observa, y baso mi suposición en un fragmento de un soneto de la primera obra de Dante, ‘La Vida Nueva’, que a su vez pudo haber sido inspiración para la pintura de Holiday:
“Y su belleza es de tanta virtud,
que a las demás ninguna envidia alcanza,
y así con ella las hace andar vestidas
de gentileza, amor y fe”
Reconozco, sin embargo, que cuando Dante vio por primera vez a Beatriz, ésta lucía un vestido rojo:
“Sobre el cándido velo, orla de oliva
Dama me apareció, tras verde manto,
Vestida de color de llama viva”
Pero, ¿es posible que una niña de apenas 8 años, que era la edad que tenía Beatriz cuando Dante la vio por vez primera, luciera un vestido de tales características? Bien pudo haber sido color escarlata, ¿pero con aquella connotación erótica de “llama viva”? También es cierto que somos unos neófitos en aquello de la sensualidad infantil.
En mi empeño por dar con una respuesta, el destino me condujo una vez más a Jorge Luis Borges, quien en el último de sus ‘Nueve ensayos dantescos’, titulado: ‘La última sonrisa de Beatriz’, escribe:
“(…) Beatriz, cuya mirada solía colmarlo de intolerable beatitud, Beatriz que solía vestirse de rojo, Beatriz en la que había pensado tanto que le asombró considerar que unos peregrinos, que vio una mañana en Florencia, jamás habían oído hablar de ella, Beatriz, que una vez le negó el saludo, Beatriz, que murió a los veinticuatro años, Beatriz de Folco Portinari, que se casó con Bardi”.
El texto de Borges podría terminar de derribar mi inclinación a pensar que ninguna de las damas de la pintura de Holiday es Beatriz, pero es el propio escritor bonaerense, quien abrió ante mi un nuevo abismo de dudas:
“(…) En el principio de la ´Vita nuova’ se lee que alguna vez (Dante) enumeró en una epístola sesenta nombres de mujer para deslizar, entre ellos, secreto, el nombre de Beatriz. Pienso que en La Divina Comedia repitió ese melancólico juego.”
El amor de Dante por Beatriz es un amor furtivo, secreto. Creo, por lo tanto, que las tres damas del cuadro, que podrían ser infidelidades del poeta, enmascaran la devoción de éste por Beatriz y la ocultan.
Intentaré responder brevemente ahora a su segunda pregunta: Los cuatro personajes del cuadro, además, muestran cuatro formas de seducción. ¿Cuáles son? El poema épico ‘La Divina Comedia’ puede leerse según los cuatro significados que se atribuyen a los textos sagrados: literal, moral, alegórico y anagógico. También, en la parte Infierno, Canto I, Dante utiliza la metáfora de la selva para representar el pecado: Oscuridad, que muestra la falta de luz divina; Salvaje, que domina el instinto sobre la razón; Áspera, porque lastima el alma y Espesa, porque no hay camino, no hay salida. (¿Será el amor físico?)
Trágicamente suya,
Berthe
Estimado mostachón; al contrario, parece que el desdén fingido de la infausta -la de rojo está en bandeja y la de azul es percherona agraciada- hace ver que el encuentro de desagravio es inminente; cierto, al buen Dante lo mata la incertidumbre, pero la Dama no tiene dudas.
Es la dama de rojo, por que intenta ocultar su rostro tras la cabeza de su amiga y no quiere hacer contacto visual con Dante
Berthe- escribiste: "¿Cuál de las tres damas es Beatriz? Me inclino a creer que ninguna"... o las tres.
Excelente apunte.
Beatrice es una sombra que se desvanece después de pasar el puente. Es la belleza fugaz que deja su huella indeleble en el pensamiento.
Quedó patente en Vita Nuova:
“Y su belleza es de tanta virtud,
que a las demás ninguna envidia alcanza,
y así con ella las hace andar vestidas
de gentileza, amor y fe”
Beatrice no es real, en esto está su belleza.
Salud
Francesc Cornadó
Publicar un comentario