sábado, 30 de abril de 2011

El niño Étimo

En nuestras sociedades, la vasta, pero liliputiense tribu de quienes aún no han crecido lo suficiente para adquirir el rango de adultos, se inscribe en la etapa de la niñez. Los romanos, apasionados de la estructura, el orden y la clasificación, dividían de la siguiente manera las edades:
1- Infante: de 0 a 2 años. Del latín in + fans: que no habla
2- Párvulo: de 2 a 5 años. Del latín parvus: pequeño
3- Pueril: de 5 a 13 años. Del latín puer, niño
4- Púber: de 13 a 17 años. Del latín pubis (porque allí aparece el vello)
5- Adolescente: de 17 a 25 años. Del latín adolescere, ad + alo (nutrir, alimentar, hacer crecer) + escere: al que le falta algo, que está creciendo

La palabra niña o niño proviene del latín ninnus, onomatopeya infantil que surge cuando apenas se empieza a hablar, igual que: nene, nana, enano, mamá, bebé... Chiquillo es diminutivo de chico. Chavo o chaval proviene de centavo (pron. centsavo), de pequeño valor. Crío proviene de criatura, de crianza, criar (en el sentido de nutrir, cuidar, instruir). Mocoso se usa porque los chiquillos en su agitada movilidad física resoplan de manera constante hasta que resbalan de las mucosas nasales precisamente, los mocos. Rapaz, rapazuelo y arrapiezo, usados más bien por los ibéricos, provienen de rapiña, del latín: rapina: 'robar', por lo cual son términos despectivos, pues acusan a los niños de no respetar las cosas que suelen hurtar o arrebatar. Y también en España, al niño se le dice churumbel, deformación en caló, de cascabel, por el ruido y alegría que en general producen los chavitos. Inocente viene de in + nocere, que no es nocivo. Los argentinos dicen pibe, del italiano pivello, novato, aprendiz. Los nahuatlismos aportan toda una gama de referencias infantiles: chilpayate, el que babea; escuincle, (como) perrito flaco de pelo escaso; chamaco, regordete; cuando alguien se encuentra chípili o triste hasta las lágrimas como niño chillón, es porque alude al vocablo náhuatl, tzipitl, bebé lactante; que alguien se haga guaje, viene de uaxzin, 'niñito', como si fuera niño 'inocente'; pilmama, de pilli, 'hijo'; y mama, 'la que carga'; plebe, es deformación de pipil, niño; mi chipote, viene de cipote, de cipit, hijito. Los mexicanos norteños se refieren al huerco (o a la huerca) en el sentido de niño latoso, llorón o insoportable; proviene del gallego huerco como 'perro aullador'; ambos del latín Orcus u Orco, el dios romano que con sus perros, jalaba a los humanos entre llantos y gemidos, al mundo de ultratumba.
Pedagogía, pediatría, pedofilia o paidofilia, pederastia y enciclopedia provienen de etimologías cultas derivadas del griego: paidós, niño.
Teatro callejero de títeres en París,1950. Se exhibía San Jorge y el Dragón. El fotógrafo Eisenstaedt captó el momento en que el Dragón emerge del lago y se acerca sigiloso por detrás de la Princesa y el Caballero, mientras conversan.

3 comentarios:

Metztli dijo...

Muy muy interesante la información. Además la primer foto me encanta, por que el el marco de la "boda real" que importa el beso.... la expresión de la niña es genial.
En segunda foto esta increible como el fotógrafo captó el gesto que provoco lo que los niños veian.

Daniel Glez. S. dijo...

¡Me encantó la foto de los niños que ven el teatro callejero! Queda perfecta para un día como hoy (aunque la "minervita" tiene lo suyo).

Anónimo dijo...

Lindo, faltote el término imberbe. Un beso infantil pa ti. B