miércoles, 22 de septiembre de 2010

Y ahora dónde meten al monote: propuesta

Buscan destino al Coloso
Dora Luz Haw/Reforma
DF, 22 septiembre 2010.- El Coloso que se levantó la noche del 15 de septiembre en el Zócalo tiene un tiempo de vida de 10 ó 15 años. Para que la escultura de 20 metros de altura y 8 toneladas de peso dure un lapso mayor debe someterse a un tratamiento especial. La obra es de poliuretano, material biodegradable que no se pudre ni genera hongos, pero requiere conservación. Lo ideal, considera su autor, el escultor Juan Carlos Canfield, sería tomarlo como modelo para hacer un molde y entonces realizar una obra de concreto. (Antes de que el artista inspirado a las carreras, comience a preparar la mezcla, que diga cuánto cobró por el Argumedo de poliuretano.)
La Secretaría de Educación Pública (SEP), todavía no decide el destino de esta figura que formó parte del segmento Revolución e Insurgencia que encabezó el director escénico Jorge Vargas, como parte del desfile que se llevó a cabo sobre Paseo de la Reforma y la Plaza de la Constitución. Actualmente, la pieza que se construyó en Cuernavaca en los talleres de Canfield, se encuentra en una bodega del Gobierno federal (Lujambio, el monote de gel, paga la renta), al igual que todos aquellos materiales y creaciones artesanales que formaron parte del espectáculo del Bicentenario producido por el showman australiano Ric Birch.

(¡Atención! Por fin, se devela el enigma del monote traidor!)

El Coloso tiene un zapato y una espada rotos. Está dividido en cinco partes y cuenta con diez fracturas en todo el cuerpo. Estos rasgos lo caracterizan como si fuera una pieza de alguna excavación arqueológica. Sus autores (se confirma que no siempre dos cabezas piensan mejor que una), el director escénico Jorge Vargas y el escultor Juan Carlos Canfield, explican que su idea era presentar una pieza que diera la idea de estar lastimada por haber estado sepultada durante mucho tiempo. (Ah, qué buena racionalización a posteriori: ahora resulta que Benjamín Argumedo es ruina arqueológica. ¡Es ruina histórica!)
"Esta estatua de piedra como recuperada del panteón de la historia, es la de un coloso insurgente. Es como una ruina encontrada que será reconstruida, ensamblada, como un pasado que intenta hacerse presente", dijo Vargas.
(¡Propongo que pinten de azul al Monote Colosal y lo coloquen junto a los Arcos del Milenio, pero ya!¡Viva Bi-México! MFM.)

3 comentarios:

Anónimo dijo...

El Colos(i)o y la canción de Syntek quedarían en primer lugar en la lista de los peores gastos de la celebración. No hay remedio, ya les pagaron a sus autores.

Anónimo dijo...

ponganlo en los arcos del milenio

Anónimo dijo...

donde lo meterán? en el culo de alguien que lo tenga del mismo diametro del tunel del drenaje profundo, nomas asi