martes, 31 de agosto de 2010

Regateo

Abandonó la tienda luego de adquirir a un precio razonable -no hay comerciante que no regatee- la máscara para posterior sesión amatoria, pero durante todo ese tiempo en el interior de la tienda, no dejó de sentirse bajo intensa observación. Ya en la calle concluyó que esa rara comunicación con los objetos expuestos en muros y estanterías, ocurría porque en realidad, no hay rostro verdadero sino máscaras verdaderas: la imagen social, verbigracia. Su amiga, otro ejemplo, ¿acudiría a la cita con su rostro o con qué máscara? MFM.

2 comentarios:

Sergio dijo...

esa sensación de ver y sentirse visto portando una máscara, me recordo la escena del baile en el castillo-mansión de la película "Eyes wide shut" que de nuevo tiene a Stanley Kubrick en la dirección.

Falcón dijo...

Sergio- buena asociación. Te recomiendo la novela en que se basó Kubrick para su película. Es 'Relato Soñado' de Arthur Schnitzler publicado por editorial El Acantilado (traducción de Miguel Sáenz). Añado fotograma.