jueves, 12 de agosto de 2010

Ah, cochinillas

Indiferente a su embrollada definición: "Crustáceo isópodo terrestre", la cochinilla se divierte en grande ahí donde encuentra abundante humedad, gracias a que la protege (se lee en la citada definición) un "exoesqueleto rígido, segmentado y calcáreo". En compañía de dos amigas que al igual que ella (según se define), "miden de uno a dos centímetros de largo, de cuya figura aovada emergen siete pares de patas", se dedican a presentar un espectáculo de vuelo por los aires como bolos; su nombre artístico, variante feminista del cuento, es el de Las Tres Cochinillas. Por supuesto que detestan ser confundidas con insectos, pues a diferencia de estos pisoteables bichos, las cochinillas no pasan por fase de larva. Así que para mantenerse en forma sin complejos y sin perder la aovada cintura (de acuerdo siempre con la definición), "se alimentan de detritus vegetales que encuentra bajo troncos o piedras húmedas". Así, Las Tres Cochinillas se lanzan al aire propulsándose con sus patitas, mutua y sucesivamente, sin perder el resuello porque (se define) "respiran mediante branquias". Cuando alguien del público les pregunta por el Lobo Feroz que forzosamente incluye el cuento, las Tres Cochinillas se enrollan sobre sí mismas haciéndose bolitas de amorsh.(MFM)

1 comentario:

Anónimo dijo...

intereante