¿Era guapo Hidalgo ?

Cuando Miguel Hidalgo repicó la campana de la iglesia de Dolores, Guanajuato, para "ir a coger gachupines", tenía 57 años. No era ningún anciano ¿Por qué se le representa entonces así, viejo y cansado ? Porque toda la iconografía del sacerdote jesuita se deriva de la versión de Joaquín Ramírez , comisionado para pintar dicho retrato (ver arriba) en 1864 -esto es, 53 años después del fusilamiento de Hidalgo- por el emperador Maximiliano de Habsburgo, quien, como extranjero curioso, debió de preguntar cómo era el tan mentado "Padre de la patria". Y al parecer, nadie supo responderle.
El artista Joaquín Ramírez se dirigió entonces al pueblo de Dolores para recabar datos sobre el aspecto físico de Hidalgo. Habló con la hermana, conoció a otros de sus hermanos; encontró una estatuilla (ver a la der. ) que había esculpido un artesano del lugar, un tal Clemente Terrazas.
La información sobre el aspecto físico del cura, sin embargo, fue imprecisa: de mediana estatura y ojos claros (¿verdes, azules, grises ?) ;cuello ligeramente torcido hacia la izquierda; nariz recta, labios delgados, tez muy morena (¿por qué lo pintan blanco?) ; frente alta y cabeza perfectamente modelada (según cita Juan Mateos, testigo de la época) . No se hace referencia a la calvicie: ¿era natural o se trataba de la tonsura reglamentaria de clérigo ?¿Qué podía sacar en claro el pintor de la corte de Maximiliano ? La respuesta fue el retrato hablado que se aprecia arriba.
Resulta así, difícil saber con exactitud cómo fue físicamente Miguel Hidalgo; lo que sí es claro es que la historia oficial forzó toda la iconografía para representarlo como figura patriarcal, de gran profeta como Moisés, como Dios bíblico, más abuelo incluso que Padre de la Patria.